Ojos

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9 de abril de 2013

Ataques de pánico

Mü§îç: MC Mong - Indian Boy


Llevo cerca de 5 meses saliendo todos los domingos por la mañana a manejar con mi papá. A pesar de que este último mes ya conduzco por avenidas transitadas, lo cierto es que cada vez que estoy tras el volante me dan ataques de pánico. Pocas cosas en la vida son las que me ponen nerviosa (bueno, en realidad son muchas las que me ponen nerviosa, pero al nivel de no dejar de temblar y que me dejen la boca seca son muy pocas). 

Es angustiante el hecho de que todo el día me estoy mentalizando para que llegando del trabajo me suba al carro y salga un rato con Alf al parque (como lo he venido diciendo desde hace unas entradas atrás) y cuando llega el momento de la verdad, simplemente no me atrevo a agarrar las llaves y prefiero subirme a mi cuarto. 

Es más fastidioso aún que la gente se crea con la libertad de disponer del Alfimovil sólo por el simple hecho de que yo no lo maneje. ¿Qué demonios les importa?. Si ellos lo estuvieran pagando voy de acuerdo pero creo que es muy mi p...roblema si no quiero sacarlo del garage. 

No entiendo bien cual es el motivo que origina tanta angustia en mi. No creo que sea el simple hecho de manejar mal, porque sé que no lo hago, creo que es el hecho de dañarlo, de que le peguen y teniendo en cuenta que tenerlo me está costando mucho trabajo (además de dinero) y que es uno de mis más grandes sueños hecho realidad, lo más probable es que inconscientemente quiera mantenerlo en una burbuja de cristal, intocable, como tengo todas las cosas que aprecio. 

Es como esos discos, libros o cosas que atesoro, los compro y solo escucho / hojeo / veo una sola vez y después los regreso por el resto de la eternidad a su envoltura.

¡En serio que ya deseo salir a dar el rol en el Alfimovil! T_________________T, pero el miedito puede más.

 Por cierto, el otro día andando con mi papi, me tocó tomar una curva, pero a veces es tanta la información que tengo que procesar de un momento a otro que se me olvidó bajarle a la velocidad y la di yendo en 4ta., el carro se desestabilizó y chillaron las llantas, yo de nervios me empecé a reír y mi papá me regañó muy feo.
 
Minutos más tarde me comentó que lo que había hecho estaba mal, y no precisamente hablaba de la velocidad a la que dimos vuelta. Me dijo que en ocasiones cuando uno maneja y provoca ese tipo de situaciones lo peor que puedes hacer es reírte. La razón: la gente podría percibir que te estás burlando de la idiotez que hiciste y que no te importa tu seguridad o la de ellos, le hice hincapié en que yo suelo reírme de todo por nervios, no precisamente porque me burle, pero me dejó pensando lo que dijo y sin duda tiene razón. 

Trataré de no reír en situaciones como esa, seguramente si lo hago, no pasará nada bueno :/



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