La reina de las abejas estaba en el panal,y le dijeron: "Regia Majestad,alguien le quiere hablar."
Cortado, entró el jicote, humilde de condición,pero ilusionado de pedir,pedirle su corazón.
"Parece, parece que no sabe,no sabe con quien trata,igualado bigotón.¡Soy la reina, la reina por bonita,y un jicote aguamielero no cuadra con mi amor!"
Silencio quedó el jicote con tanta humillación,a la orgullosa reina del panal así le contestó:
"Leí que éramos iguales, asegún la Constitución.La sociedad sin clases la creí,pero ya vió que no!"
Y el jicote Aguamielero, con bigotes de aguacero, rezumbando regresó a su maguey, sin rubores en la frente porque ultimadamente a la sombra de las pencas es el rey.
La reina de las abejas estaba libando miel,y una de sus obreras le gritó:"¡Ai'stá de nuevo aquél!"
Mandando cerrar la puerta,la reina se le negó,porque su afán es que se ha de casar con un emperador.
"Parece, parece que no sabe,no sabe con quién trata ese prieto barrigón.¡Soy la reina, la reina por bonita,y un jicote aguamielero no cuadra con mi amor!"
Fruncido quedó el jicote, arqueandose de dolor;y en su pesar, cantando, el infeliz así se despidió:
"Adiós, reinecita hermosa, ¡ay!,que me trató tan mal;pero asegún las leyes del país aquí todos son igual."
Y el jicote aguamielero,con bigotes de aguacero, rezumbando regresó a su maguey; sin rubores en la frente porque ultimadamente a la sombra de las pencas es el Rey.
Cri-Crí.
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